Formando el terror... mientras veo por la ventana en el viaje.

A medida que mas pienso y veo el mundo, este se abre con nuevas formas, nuevas estructuras, nuevas posibilidades. Me doy cuenta que según mi momento se dispersan ciertas características, pudiendo ser completamente devastadoras y negativas. 
Es necesario frenarse un poco.
Aunque estén las chances de contener tales nociones, tales apreciaciones y secretos crueles... no debemos insistir en ello. Hacerle demasiado caso.
O nos veremos desbordados, devorados por las cosas malas.
Ahora más que nunca comprendí que somos creadores, tenemos ojos que miran con diferentes prismas... perspectivas. 
La tarea de arruinarlo todo es una parte mía desde hace tiempo, que no se muy bien a que corresponde. A veces persiguiendo esa noción, encuentro lo peor y lo mejor de mí. Si quería ver esfuerzo, desgarro, intensidad... allí permanecían latentes.
Otras veces es totalmente dañino. Carente de beneficios.
Hay que tener cuidado de quedarse en ciertos hábitos. La oscuridad puede ser buen en ocasiones, brinda soledad, tranquilidad, tiempo para pensar, profundidad en un mundo superficial. Puede hacerte fuerte, serio o mas maduro y neutro a la hora de elegir. Pero también puede arruinarte. Ser cruel en demasía. Despojarte de toda felicidad, anularte, desnutrirte, deshidratarte.
Puede preocuparte, hacerte sentir paranoico. Aunque sé.... puede protegerte incluso mejor que la luz.
Escoger y aferrar una resolución negativa sin estar completamente seguro de que esa es la realidad puede prepararte de antemano si es que termina siendo cierto, pero... el tema es que no necesariamente es así.
Por qué tendría que serlo? justo así? Cuando uno adopta esa respuesta, las ramificaciones de la misma se vuelven catastróficas, dolientes, negativas, venenosas, incluso pudiendo generar un efecto en cadena progresivo que te tira al peor pozo en el que te hayas metido. Y solo por asumir algo incorrecto, que en un principio sirvió para cierta situación.
Uno tiene que hacer el esfuerzo y quebrar esas intenciones adversas.
Frenarse un rato hasta estar mas frío y volver a plantearse las cosas.
Estamos muy acostumbrados también a seguir siempre ciertos vínculos armados de ideas establecidas hace tiempo, que nos olvidamos lo importante que es abrir otros caminos en aquella sinuosa y hermosa linea de energía.