miércoles, 29 de julio de 2015

Soñando estar bien...


Estaba preguntándome si algo interesante ocurriría ahora. No me creerías si te dijera que esto tiene mucho de eso. Este momento, esta situación.
Expandir nuestros límites de soportar cosas, atravesar males sin siquiera imaginarnos mínimamente lográndolo alguna vez.
Esto... tiene mucho de una historia épica, de esas en las cuales se levantan héroes e incluso algunos mueren y otros toman decisiones difíciles para hacer grandes hazañas.
El día de mañana quizás ocurra otra batalla, o quizás este mucho mas cerca aquel punto en la historia donde pasa algo tan importante capaz de cambiar las partes.
Hoy... soñé con vos.
Era un día soleado, bastante hermoso. En un momento nos encontramos así de la nada, en el exterior, en el medio de una ciudad construida con ideas agradables, pulcritud, gente feliz, tranquilidad.
Me sentí cómodo el corto tiempo que nos saludamos. Ninguno de los dos estuvo pensando en las dificultades, solo... eso, un encuentro, y nosotros siendo... nosotros mismos.
En otro tramo del sueño, casi como si apareciera directamente allí, yo estaba conduciendo una bicicleta, yendo a no se donde entre las calles y los negocios. Pase por un lugar parecido a un bar, tenía mesas y un pequeño quiosco adelante. Se escuchaba tu voz por sobre las demás y si bien no recuerdo que decías, puedo estar seguro que esa voz fue como una melodía entre tanto ruido. No había ruido, pero no encuentro otra forma de darlo a entender.
Estabas reunida seguramente con algunos amigos, contándoles anécdotas y pasando el rato. Todo lo malo parecía haberse borrado, no había preocupaciones, no se sentía aquel temor de no saber hacia donde se dirige tu vida.
Y eso es todo... yo no frene mi recorrido... simplemente te escuche y seguí.
En ese momento me levante con la sorpresa de haberte soñado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario